Resumen
El barracón de las mujeres es una novela que relata la historia de María, una joven periodista sumida en el alcoholismo, quien, investigando sobre la vida de su abuela, da con el testimonio de Isadora Ramírez, superviviente del campo de concentración de Ravensbrück.
La primera secuencia nos presenta a María despertando tras una noche de excesos con el alcohol, recibiendo acto seguido una llamada de su madre para informarle de que su abuela, Soledad, ha fallecido. Ya en el entierro, su atención se dirige a una señora mayor llamada Isadora, cuyo nombre encuentra escrito detrás de una fotografía de una Feld-Hure —nombre asociado a las prostitutas de campo— en la casa de Soledad. Ante esto, María decide investigar más sobre la vida de su abuela, esta vez con la ayuda de Carla, su pareja, quien estudió historia junto a ella.
A partir de ahí, enzarzándose en una investigación periodística que la incentiva a recuperar su pasión por su trabajo, la narradora contacta con Isadora para escuchar su testimonio como superviviente; todo en contra de la voluntad de Carmen, madre de María, quien dice no querer saber nada de Isadora. Este testimonio da cuenta, inicialmente, de la infancia de Isadora durante la Guerra Civil, mientras su padre y su hermano luchaban en el bando de los sublevados, hasta el posterior asesinato del primero y la huida del segundo al instaurarse la dictadura. De aquí en adelante, la narración se transforma en una evocación de la vida de Isadora, quien, de la mano de Carmen y su tía Teresa, decide escapar de España en busca de Ignacio, su hermano. De esta manera, con la ayuda de Juliana, amiga cercana de Ignacio y miembro del Partido Comunista, consiguen los papeles necesarios para poder escapar de España a París, gracias al dinero del doctor Guillén, un exiliado español que había luchado en la guerra y que se dedicaba a financiar el exilio de otros españoles. Allí es donde Isadora, mientras trabaja para el partido con la ayuda de Vicente Tovar y Danielle Casanova, miembros de la Resistencia, descubre que su hermano Ignacio no llegó a escapar de España, sino que se suicidó antes de ser capturado por los fascistas.
Poco tiempo después, una vez comienza el conflicto armado en Europa y el régimen alemán ocupa Francia, tanto Teresa como Carmen e Isadora, junto con sus vecinos los Aussolin, una familia de judíos, son atrapadas por la Gestapo en la Nochebuena de 1941 y transportadas en tren al campo de concentración de Ravensbrück. Cuando llegan allí, Teresa, por un lado, es trasladada al grupo de las españolas, mientras que Isadora, por otro lado, es clasificada como prostituta del campo. Por su parte, Carmen es asesinada en la cámara de gas nada más llegar, debido a que la consideraban demasiado mayor para realizar el trabajo que se les exigía.
Cabe destacar que, mientras Isadora narra todos estos hechos en primera persona, se intercala la narración con el tiempo presente, donde María continúa investigando sobre las prostitutas de campo y la historia de su abuela. De esta forma, Carla y ella descubren un collar y un escrito de Isadora, escondidos detrás de las paredes de la casa de Soledad.
De vuelta al testimonio de Isadora, esta cuenta su experiencia en el campo en que fue violada, además de describir el trato que recibían las prostitutas. Allí conoce a otras prostitutas del campo, como Vicenta y Maria Radu, siendo esta última una mujer judía que se hacía pasar por alemana. A Vicenta, que era enfermera, la trasladarán a la zona de experimentos del campo, en donde la obligarán a experimentar con otras presas; sin embargo, poco tiempo después, esta termina suicidándose y Maria Radu es asesinada por una de las militares del campo. Asimismo, la tía de Isadora es torturada y posteriormente asesinada por una de las guardianas como venganza, ya que Isadora había sido forzada a acostarse con un soldado al que ella deseaba tener.
Después de esto, Isadora descubre durante sus sesiones, gracias a un prisionero español llamado Gabriel Sevilla Caballés, que los alemanes han empezado a borrar la información sobre el campo según como se acerca el fin de la guerra. No obstante, pronto deja de poder encontrarse con Gabriel, pues es forzada a trasladarse a la cabaña privada del guardia Johann Schwarzhuber.
Finalmente, cuando llega el final de la guerra, el campo de Ravensbrück es liberado e Isadora se reencuentra con Martha Aussoulin. Juntas deciden marchar hacia París y encontrarse con Vicente Tovar y el doctor Guillén, quienes ayudan a Isadora a recoger todos los papeles necesarios para volver a España.
Sobre el final de su testimonio, y ya habiendo llegado a España, Isadora le revela a María que había quedado embarazada en el campo y que su hija sigue con vida, quien resulta ser la madre de María, Carmen, nombre que rinde homenaje a su propia madre. No obstante, Isadora rechazó hacerse cargo de la niña, pues su existencia le resulta un recordatorio más de todo lo que padeció en Ravensbrück, y por eso Soledad la adopta. De este modo, Isadora es realmente la abuela biológica de María, explicando así el porqué del rechazo de Carmen hacia ella.
La novela finaliza con María descubriendo el secreto e Isadora sintiéndose aliviada de poder liberarse de la carga que había asumido durante tantos años.