Resumen
«¿Si a una oca le cortan la cabeza, sabes cuántos metros puede seguir andando ttipi-ttapa-ttipi-ttapa (pasito a pasito)?» (311). En esta frase se puede resumir el punto de partida y la evolución de los principales hilos narrativos de la novela Antzararen bidea (El camino de la oca). Las vidas de los protagonistas pueden ser leídas como los recorridos de dos ocas heridas que han perdido su cabeza. El duelo debido a las pérdidas injustas de personas cercanas, la imposibilidad para olvidar y las dificultades para aprender a vivir debajo de todo ese daño, es lo que caracteriza la vida de ambos personajes. Tal y como Lisa le confiesa a Jesus en un pasaje del libro, «lo que (les) ha unido entre sí es el deseo de saber, o mejor dicho, la necesidad de saber» (285). Sin embargo, antes de las implicaciones y la lucha por la memoria colectiva y cultural del próximo pasado, ambos personajes se encuentran por otra razón. Lisa, después de tocar fondo, gracias a la ayuda de su amigo Gigi, trabajará en un nuevo empleo en una lujosa casa de Donostia, precisamente cuidando de Jesus, un anciano que está en las últimas. Así pues, se entrelazan la vida del único amigo del grupo, que en primavera de 1936, se libró del pelotón de fusilamiento por haber tenido un tío falangista y la vida de Lisa, una madre joven al que se le ha muerto su hijo mientras manipulaba una bomba, en nombre de ETA, en verano de 2003.
Cuando las ocas chocan entre sí, de la misma forma que ocurre en el juego de la oca, las capas narrativas se sobreponen, se mezclan y se intercalan. Es decir, tal y como generalmente sucede en las ficciones de la memoria contemporáneas, el orden cronológico se disuelve en anacronías narrativas y en la simultaneidad de múltiples estratos temporales. Con el fin de contextualizar el itinerario vital de Jesus, en un plano se narra la época de la República y la anteguerra en Trilluelos, un pueblo literario de la Rivera Navarra. En cambio, para trazar el itinerario de Lisa se describen las décadas de finales del siglo XX y principios del XXI en Donostia y sus alrededores. En el primer marco de ficción, se narra la juventud de un grupo de amigos conformado por Dioni, Paula, Justino, Candi y Jesus, la cual se ve quebrantada por los fusilamientos en las vísperas de la sublevación militar del 36. El segundo nivel narrativo trata del conflictivo proceso que se conoce como Transición y la trágica evolución de la lucha armada de ETA. Los protagonistas de este último marco son Igor, Amaia, Gigi y Lisa. Puede decirse que la memoria comunicativa marca el principio a partir del cual se construyen los puentes entre ambos planos. Justamente, Lisa comienza a indagar la historia contemporánea del País Vasco motivada por una foto en blanco y negro que encuentra en la casa de Jesus (analepsis).
La categoría social de Igor y de Amaia: miembro de ETA. Y la de Jesus: Requeté.
Las citas bibliográficas han sido tomadas del libro original en euskera.